En los últimos tiempos podemos observar que hay una gran lucha entre dos grandes bandos: por un lado tenemos una gran masa reactiva, que vive en la búsqueda perpetua de placer sin sentido, de una vida vacía y frívola, por otra parte vemos un reducido grupo de individuos que desesperadamente buscan darle sentido a su vida y tratan de trascender mas allá de su condición finita.
Lamentablemente los primeros son cada vez muchos y los del segundo bando su número es mas reducido. El fenómeno que presento no tiene que ver con una clase social o nivel educativo, tiene que ver con una estrategia que prácticamente deja todos los niveles de la sociedad desarticulados, sin mando, ni dirección, llevando a la población a un estado de profundo letargo que sólo responde a los estímulos que el dinero provee.
Esto último se logró a través de un proceso muy complicado que comenzó en el siglo XVI, el dinero se convirtió en el verdadero dios de Occidente.
A nuestros jóvenes la sociedad actual les hace creer que lo único importante es el dinero, su posesión y consecuente despilfarro, sin él, las personas no valen nada, no importa cuantos méritos tengan, sin dinero no valen nada.
Las grandes masas de las que hable líneas arriba están obsesionadas por obtener dinero y comprar objetos que les den satisfacción, se clasifican así mismos, según lo que tengan, por ejemplo qué carro traen, si tienen televisión de plasma o viven en una "zona adecuada", se enaltecen dependiendo de sus posesiones, tratan de ocultar sus complejos, vicios y orígenes bastardos con sus carros del año y otras banalidades. A todos aquellos que no tienen ciertas posesiones son denigrados por los primeros como resultante de su falta de bienes. También los primeros luchan por acabar con los segundos ya que estos últimos desentonan con la antipatía generalizada.
Lamentablemente los primeros son cada vez muchos y los del segundo bando su número es mas reducido. El fenómeno que presento no tiene que ver con una clase social o nivel educativo, tiene que ver con una estrategia que prácticamente deja todos los niveles de la sociedad desarticulados, sin mando, ni dirección, llevando a la población a un estado de profundo letargo que sólo responde a los estímulos que el dinero provee.
Esto último se logró a través de un proceso muy complicado que comenzó en el siglo XVI, el dinero se convirtió en el verdadero dios de Occidente.
A nuestros jóvenes la sociedad actual les hace creer que lo único importante es el dinero, su posesión y consecuente despilfarro, sin él, las personas no valen nada, no importa cuantos méritos tengan, sin dinero no valen nada.
Las grandes masas de las que hable líneas arriba están obsesionadas por obtener dinero y comprar objetos que les den satisfacción, se clasifican así mismos, según lo que tengan, por ejemplo qué carro traen, si tienen televisión de plasma o viven en una "zona adecuada", se enaltecen dependiendo de sus posesiones, tratan de ocultar sus complejos, vicios y orígenes bastardos con sus carros del año y otras banalidades. A todos aquellos que no tienen ciertas posesiones son denigrados por los primeros como resultante de su falta de bienes. También los primeros luchan por acabar con los segundos ya que estos últimos desentonan con la antipatía generalizada.
El capitalismo exacerbado y ciertos rasgos sociológicos de la posmodernidad nos han dado ha entender, tal y como lo afirmaba Marcel, que el tener es más valioso que el ser. Las nuevas generaciones (y también las viejas), han olvidado el cultivo ontológico por el de la mercancía.
ResponderEliminarMi nombre es Gerardo soy estudiante de la UPIITA, y bueno navegando en la red me encontre con este blog, mi opinión es que los seres humanos han adoptado esta forma de pensar del tener mucho me hace más importante y feliz, por la idiosincracía de la época moderna y lo vemos a diario en los medios de comunicación masivo un ejemplo tal es el señor Carlos Slim que fue nombrado hace unos días por la revista Forbes como el hombre más rico del mundo, y tal que es un Mexicano debemos sentirnos orgullosos cuando olvidamos algunos principios básicos, estaría bien que se estudiará desde educación secundaría y medio superior un poco de Ontología y Metafísica para entender algunas cosas esenciales, lo que no se me hace justo hasta cierto punto, es que se señale que a las personas con mucho dinero una clase alta se les juzgue de ese modo hay de todo en este mundo, pero hay personas que tienen dinero donde encuentran un equilibrio en el bien tener y el bien estar, y me atrevo a mencionarlo porque conosco gente así y gente con dinero que es fría y su único fin es tener dinero poder sentir realizado el deseo de tener el control de todos o una importante masa de personas un ejemplo claro en donde se ve este efecto es la política.
ResponderEliminarEs muy confortante leer el Capital para entender un poco ciertas cosas que pasan y pensamientos ó filosofías donde encontramos lo que es el mundo moderno y al leerlo parecierá que se escribió hace unos instantes, bueno eso es lo que opino, cualquier comentario con respecto a mi opinión me la pueden dar en el siguiente mail:
gaga2390@hotmail.com