¿Y sabéis qué es para mí, el mundo? ¿Tendré que mostrároslo en mi espejo? Este mundo es un monstruo de fuerza, sin principio, sin fin; una dimensión fija y broncínea de fuerza, que no aumenta ni disminuye, que no se agota sino que simplemente se trasforma; invariablemente grande en cuanto totalidad, una economía sin gastos ni pérdidas, pero asimismo sin crecimiento, sin entradas; rodeado por la nada como por su límite; no es cosa que se desvanezca ni se gaste; ni que se extienda indefinidamente, sino en cuanto fuerza definida, incrustada en un espacio definido y no en un espacio que estuviese “vacío” en algún punto; más bien como fuerza omnipresente, como juego de fuerzas y olas de fuerzas, siendo al mismo tiempo uno y “muchos”, acumulándose aquí y al mismo tiempo disminuyendo allí, un mar de fuerzas borrascosas anegándose en sí mismas, eternamente cambiante, refluyente; con inmensos años de retorno, con un flujo y un reflujo de su formas, que se despliegan de las más simples a las más complejas, de las más tranquilas, de las más fijas, de las más frías a las más ardientes, a las más salvajes, a las más contradictorias, y de la plenitud retornando a la simplicidad, del juego de los opuestos al placer de la armonía, afirmándose a sí mismo aún es esa identidad de sus días y sus años, bendiciéndose a si mismo como lo que debe retornar eternamente, como un devenir que no conoce ni saciedad ni hastío ni cansancio -: este mi mundo dionisiaco del crearse-a-si-mismo-eternamente, del destruirse- eternamente-a-sí-mismo, este mundo misterioso de la doble voluptuosidad, este mi más allá del bien y del mal, sin meta a menos que se encuentre en la dicha del círculo, sin voluntad a menos que haya voluntad en el anillo que vuelve sobre sí mismo. - ¿Queréis un nombre para este mundo? ¿Una solución a todos los enigmas? ¿Una luz también para vosotros, los más ocultos, los más fuertes, los más impasibles y tenebrosos? ¡Este mundo es voluntad de poder -y nada más! Y vosotros, vosotros sois también esta voluntad de poder y nada más.
Voluntad de poder es igual a la transmutación de todos los valores morales. El hombre es un puente que se tiende hacia el superhombre, alcanzar tal condición humana requiere de la voluntad para así entender qué es el mundo aunque para ello tengamos que crear al mundo constantemente así como destruirlo una y otra vez. Porque podemos bañarnos en mismo rió 2 veces pero nunca con las mismas aguas.
Wow, tengo que admitir que al principio me quedé con cara de ¿what?, pero leyendo como muchas veces, jajaja!, la conclución es la misma, el hombre tiene la voluntad de poder, al mismo tiempo que es herramienta de esta voluntad, como decía la profesora Yelenia, la voluntad como fundamento, pero la verdadera pregunta, para mi sería, ¿de verdad estaríamos dispuestos a transmutar el mundo continuamente, a cambiarlo, aunque este cambio tenga que ser constantes, aunque tuviésemos que destruir lo que una vez ya habíamos creado?,¿de verdad vale la pena, como para armarnos de suficiente voluntad y llevarlo a cabo?
ResponderEliminarLa voluntad de poder es el rasgo fundamental de la vida, es un devenir, un eterno retorno. La voluntad de poder es el fundamento para la instauración de valores y el origen de la posibilidad de una transvaloración, es decir, la posibilidad de superarse así mismo, pues, el hombre es un puente qe sue tiende sobre el abismo para llegar al Superhombre. "Sólo donde hay vida hay también voluntad;¡pero no voluntad de vida, sino voluntad de poder!" Asi Habló Zaratustra - De la Superación de Sí mismo.
ResponderEliminarLa voluntad de poder es la superación de sí mismo, es la entrega pura del hombre hacia lo que existe, es lo qe hace pensable lo existente, es lo que explica todo mediante conceptos. La voluntad de poder es universal, todos tenemos voluntad de poder, en todos los lugares donde se encuentren seres vivos habrá voluntad de poder, ya que la voluntad de poder dota al hombre de un sentido creador, adaptandolo a la busqueda de la superación de sí mismo. Voluntad de poder es querer ir más allá de uno mismo, es la transvaloración de valores, es energia, es querer ser más. Quien tiene voluntad de poder tiene la fuerza.
No se busca destruir nada, sólo superar aquello que existe, para superarlo debemos hacer uso de la voluntad de poder, pasar de tener una carga a dar el paso hacia un sabio decir si. Decir SI es dejar de tras el yo quiero y el tú debes. El sabio decir si es lo que permite la trasformación y la superación de hombre. DECIR SI ES SIGNO DE LIBERTAD Y TRANSMUTACIÓN DE VALORES.
ResponderEliminarMike
ResponderEliminarEn efecto, el poder es porque la voluntad existe, y no seria así de no ser por la intención, que esta liada a la motivación, y que por encima de todo buscará llegar a su fin. Para hacerlo deberá ser careciente en menor grado de todo aquello cuanto necesite el ser que la determina, y que en esencia transforma con el fin de renovar
Mike
ResponderEliminarAdemás, Nietzsche habla de un súper hombre, mejor entendido como un modelo de hombre a prueba de errores que es capaz de tener poder sobre los demás y sobre sí mismo, lo que lo lleva a ser un ser trascendental.
La voluntad de Poder es la superación de sí mismo, es el principio rector de la transmutación, transvalración de los valores, que hace posible la idea del superhombre como aquel que va más allá del hombre, aquel que se supera a sí mismo una y otra vez, un eterno retorno, ya que el hombre es algo que debe ser constantemente superado.
ResponderEliminarcreo que la volunatad es el fundamento del deseo, pero tambien la voluntad nos brinda alaguna clase de poder, tal vez para cambiar nuatra forma de vida, nuestro entorno o nuestra forma de pensar y de ver las cosas, es esa clase de poder con la que todos contamos cuando hay vouluntad, de crear, de hacer para poder lograr lo que deseamos y anhelamos.
ResponderEliminarpor eso la voluntad es poder, por que gracias a ella podemos conseguir lo que queremos, y puedo decir que puede cambiar nuestros valores o transmutarlos como dice el texto, para poder superarnos y lograr, tal vez la autonomia del ser.
Efectivamente la voluntad es fundamental para la toma de decisiones, cambios, etc. Sin embargo cabe destacar dos puntos que considero importantes el primero es que desafortuademente el humano le teme al cambio porque no sabe que pueda suceder entonces aquí es donde preguntamos ¿Tenemos la voluntad para el cambio? ¿Va a resultar lo que esperamos? Después tenemos que si el humano tiene la voluntad del cambio ese es el camino a su destrucción como ente biológico pero a su construcción como ser social, por lo cual el ser humano tiene el poder de la voluntad, y así como tiene el de la voluntad también tiene el de la duda , y que por lo general este último domina al ser humano.
ResponderEliminarEn mi opinión este es un mundo de fuerza, donde nuestra principal fuerza es la voluntad y poder, un mundo que destruimos y creamos a cada momento, con nuestras acciones y deseos, es un juego en donde el hombre gana o pierde por sus decisiones impulsadas por su voluntad, en todo momento hay contradicciones de nuestro mundo, un mundo cambiante donde nada es igual donde todo nos contradice y tratamos de buscar esa voluntad que nos identifique como personas únicas en este mundo, en el transcurso de este proceso transformamos nuestra moral y forma de pensar, ¿pero lo hacemos por nosotros o por algo o alguien? .
ResponderEliminarEs cierto la energia es limitada y estamos constituidos por ella pero la voluntad por si sola es un dardo sin punta, creo que en ella se rigen nuestras acciones y es el factor mas determinante para la personalidad y caracter pero no es suficiente considerar un solo factor para todo seria como dejar la regla mas importante de la experiencia "la relatividad y el caos"
ResponderEliminar